La continuidad de la arquitectura

Reinterpretar, reinventar o adaptar

Una de las formas más sostenibles de hacer las cosas es a través de la reutilización. A todos los niveles y a todas las escalas.

Reutilizar con el mismo uso o reinterpretar, reinventar o adaptar.

La arquitectura es más duradera que las generaciones y las formas de vida. Este patrimonio es parte de ecosistemas rurales o urbanos que se adaptan y moldean a los tiempos.

Atelier Rua es un estudio portugués fundado por cuatro socios, todos ellos procedentes de zonas rurales y con experiencia directa en la arquitectura vernácula de diversas partes del país, del norte al sur y del interior a la costa. Aunque vivimos y trabajamos en Lisboa, todos hemos crecido y seguimos estando en contacto directo con estos entornos.

Hemos visitado diversos estudios en los Países Bajos y en Suiza, donde las tipologías que se desarrollaban, las escalas, las técnicas y la lógica constructiva diferían de las nuestras. Este ha sido un proceso esencial de aprendizaje para comprender las experiencias globales y adaptarlas a este tipo de patrimonio.

La demanda de turismo rural en Portugal, tanto por parte de los clientes portugueses como extranjeros, y la búsqueda de formas de vida lejos de las grandes ciudades ha llevado a la recuperación de una tradición rural muy degradada. Hemos creado proyectos por todo el país, pero especialmente en el Algarve y el Alentejo. Los proyectos van desde casas particulares a pequeños hoteles rurales con pocas habitaciones e incluso dos haciendas con más de 30 habitaciones.

Comprender el valor de este patrimonio es comprender los métodos de construcción, la relación material de la arquitectura con los espacios y el paisaje, la orientación, la luz solar o la ventilación. Se trata de formas intemporales de sostenibilidad con fundamentos y conocimientos que a veces se olvidan en el diseño de hoy en día, y que nos gusta recuperar. Nos gusta que los que viven aquí comprendan dónde están, en qué país y en qué región.

Otro ejemplo de reutilización de un espacio en Tavira, Portugal.

Casa Um, Tavira, Portugal. Foto Francisco Nogueira

Esta comprensión, unida al análisis del contexto, facilita la adaptación de nuevos programas y las ampliaciones que nos gusta realizar de forma contemporánea, mientras se explican las épocas y las fases de construcción de forma armoniosa; enfrentando lo antiguo y lo nuevo y evitando los clichés o los pastiches.

Es una forma de trabajar que se puede adaptar a cualquier parte del mundo y no es solo aplicable a la restauración rural. Queremos que los nuevos programas se adapten a lo que ya existe de forma coherente, prolongando su vida útil y dándole una razón para su continuidad, ya sea en el campo o en la ciudad. Nos gusta diseñar de una forma sensible y accesible a la vez.

No somos contrarios a la demolición –la historia se compone de una larga lista de demoliciones y construcciones– siempre y cuando se realice con criterio, ya que no todo es recuperable ni tiene calidad. Esta calidad puede ser constructiva, de inserción urbana o de lógica de funcionamiento. Pero se trata de un paso que se debe dar de forma consciente sea cual sea el tamaño, desde la vivienda más pequeña al edificio más grande.

Nos gusta diseñar con lo básico, para poder aprovechar la luz, las sombras, los planos y los reflejos, las texturas, el confort y el placer de habitar un lugar. No dejamos la tecnología a un lado; la utilizamos, aunque no de forma gratuita.

El primer proyecto turístico de esta naturaleza que realizamos fue Pensão Agrícol, que luego se amplió con la Hospedaria (casa de huéspedes). Desde entonces, hemos presentado y realizado numerosas propuestas, incluyendo una serie de cinco viviendas, en las que la Casa Um y la Casa Dois han sido recientemente finalizadas. Las demás están en construcción o en fase de diseño.

Pero como hemos mencionado, la reutilización no es solo el resultado de recuperar y reconstruir edificios antiguos. Podemos y debemos, siempre que sea posible, reutilizar los espacios, los paisajes, los programas o los entornos. Creemos que es esencial involucrar diferentes competencias en el proceso de diseño, desde la ingeniería al paisajismo.

Hemos rediseñado un camping, el Parque Tejo en Abrantes, donde la estrategia consistió en mantener y «reutilizar» los espacios exteriores consolidados. Han sido un activo para este tipo de programa, convirtiéndose en el núcleo principal del proyecto.

Otro proyecto en el que la reutilización del entorno y el paisaje son claves.

Adega 23, Sarnadas de Ródão, Portugal. Foto Nuno Almendra

Otro contexto, el proyecto Adega 23 (bodega), se basó en una nave agrícola existente. El aspecto final refleja las soluciones técnicas adoptadas para el correcto funcionamiento de este tipo de programa, donde el control de la temperatura es esencial. El exterior de la nave se cubrió con corcho, un material natural con excelentes propiedades térmicas. Se instaló una estructura de metal para proporcionar sombra y ventilación a todo el edificio.

En otro proyecto, la sala de juntas del Puerto de Lisboa, introdujimos una caja de espejos en el atrio de una antigua terminal marítima con un valor arquitectónico significativo. Conseguimos modificar su uso ocultando todo el programa y manteniendo el carácter y la escala de este espacio.

La arquitectura suele ser regenerativa, desde el punto de vista espacial y social, tanto si se centra en la renovación como en la nueva construcción. Creemos que todos los proyectos tienen una función que va más allá del propio uso de los espacios y nos esforzamos por tener un impacto positivo en la sociedad y en el paisaje con una preocupación honesta y clara por la gestión de los recursos.

Imagen principal: Camping, Parque Tejo, Abrantes, Portugal. Foto FG+SG